5:10

El reloj me dice que son las 5:10. Extraña sensación, respecto a esta hora en mi vida. Y es que a esta hora, pero de día, te fuiste. Te fuiste sin que pudiera ofrecer mi vida por la tuya; y es que acaso lo podría haber hecho hijo mío? No es acaso el día y hora de nuestra muerte el único momento exacto que tenemos marcado desde que nacemos? 5:10. Con sólo decirlo viene a mi mente ese preciso momento, donde ofrecí todo lo valioso que pude haber tenido en mí, a cambio de que no sintieras miedo alguno al partir. Al menos ese intercambio, creo, me fue permitido. Pocas cosas hay en este mundo como tu mirada... Digo "pocas" sólo para ser generosa, porque desde que te fuiste no he encontrado una sola de las demás. Hijo, mi hijo, tu madre yo, compañeros en incalculables vidas los dos. Vendrán otras u otra vida al menos en que por din te abrazaré nuevamente, para decir "te extrañé, pero aquí estoy". Es invierno hijo, el segundo que paso sin ti. Incluso yo duermo aún bajo el mismo techo que mis padres; tú, no... Al menos no con los de este mundo. Cuatro inviernos compartimos, cuatro inviernos no sentí frío por las noches porque tu cuerpecito me abrigaba como tarde de primavera, mientras hoy tengo que usar además, la última frazada con la que te cubrí para mantenerme abrigada. Haces falta hijo, siempre me harás falta, y a veces como hoy, me veo obligada a pedirme a mí misma mantener la esperanza y la fortaleza para seguir encontrando día a día la manera de sonreír aunque tú no estés aquí. No es fácil, pero lo difícil y beneficioso tiene más valor, seguramente ahora lo sabes mejor que yo. Un año y un mes... Un año y un mes hijo!! Qué es un año y un mes? Qués es desde que te fuiste? Nada y demasiado al mismo tiempo. El paso del tiempo carece ahora, como concepto, de todos los adjetivos que antes le atribuí con las limitaciones de esta mente. No pasarán mil vidas antes de vernos de nuevo. No pasarán cien, ni diez. No pasarán dos vidas antes de reencontrarnos hijo mío. La paciencia ahora, para mi corazón, es la mayor de las virtudes. Te amo mi vida.